Esta moderna pelota no necesita inflarse con aire, pues está confeccionado sin cuero ni hilo y dispone de varios sensores que señalarán al árbitro si la pelota ha salido del campo, ha sobrepasado la línea de gol o hasta si es fuera de juego. Además permitirá conocer otros datos muy importantes, como la fuerza a la que se golpea la pelota o la velocidad a la que se mueve.
Por el momento solo se trata de un prototipo, pero si en el futuro se implementase como balón oficial evitaría muchas decisiones controversiales. Este nuevo balón desarrollado por la empresa Agent y bautizado como CTRUS es transparente, no está relleno de aire y tiene en su interior un sistema de GPS y un chip RFID que ilumina la pelota en caso sobrepase los límites del campo de juego.
En su interior se esconde una cámara que podría filmar el partido desde dentro, ofreciendo una visión completamente distinta de las acciones que se producen y ayudando al árbitro a decidir correctamente.
Para desarrollar tal tarea incluiría un software de estabilización de imagen. Su sistema de transmisión de datos interno emitiría tanto la señal de vídeo como datos sobre la posición, altura, velocidad… del balón, todo esto a un centro de control de datos.
Otros deportes como el rugby o el tenis ya han utilizado la tecnología para evitar los inevitables fallos humanos. El fútbol, hasta ahora, se ha negado a utilizarlos a pesar de sus innegables ventajas. ¿Será esta pelota inteligente el que cambie por completo o marque la pauta para la implementación de nuevas tecnologías en favor del futbol?
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