Durante los grandes eventos públicos siempre ocurre que la gente tuitee sus opiniones de manera sincronizada y de forma abrumadora. Por esto mismo se daba por descontado que durante los Juegos Olímpicos veríamos un aumento en la cantidad de tuits, pero parece que los proveedores móviles británicos subestimaron la emoción de la gente.
El problema surge porque las bicicletas utilizadas en las carreras fueron equipadas con sistemas GPS capaces de enviar datos de geolocalización a centros de control, esta información debía estar disponible para que comentaristas mencionen ubicaciones y distancias de los ciclistas en cualquier momento, pero los datos nunca llegaron a su destino debido a una sobrecarga en las redes móviles.
Para salir al frente de lo ocurrido, el Comité Olímpico Internacional asegura que el inconveniente tiene que ver con la gran cantidad de gente que tuitea, e indica que aunque "ciertamente nunca prohibiremos" que la gente envíe sus mensajes, pide que "si no es uno urgente, urgente, por favor tómalo con calma".
En otras palabras, quiere que los asistentes a los eventos de estos JJ.OO. y los ciudadanos londinenses en general tuiteen a velocidad normal y no de atleta olímpico.
Fuente: theverge