Habitualmente, un arma es algún tipo de herramienta ideada para causar daño, letal o no, en una persona. Sin embargo, a medida que avanza la tecnología encuentras con que se abren otras puertas a veces inesperadas que ni siquiera viste en una película de ficción.
Lo que ves en la imagen inferior es algún tipo de pistola cuya función no es la de dañarte físicamente, sino la de conseguir que no puedas hablar o que como mucho no llegues más que a conseguir balbucear algunas sílabas inconexas.
El arma se basa en un lo que los psicólogos llaman ‘Delayed Auditory Feedback’ o retroalimentación auditiva con retraso. Dejando a un lado lo críptico del nombre del efecto, básicamente lo que hace este arma es repetirte aquellos sonidos que emitas con un retraso de tiempo muy corto, como si fuera algún tipo de eco.
La idea es que mientras estás hablando estás escuchándote a ti mismo y tu mente utiliza los sonidos que emites como referencia para poder articular palabras y frases con sentido. Esta máquina diabólica lo que hace es escucharte a través de un micrófono unidireccional y re-emitir cada sílaba que pronuncias con un retraso de 0.2 segundos provocándote confusión y, por lo tanto, evitando que puedas hablar.
De momento se trata de un prototipo ideado por unos investigadores japoneses, pero imagina dispositivos de este tipo que pudieran silenciar a alguien que intenta dar una charla o discurso, molestos manifestantes exigiendo sus derechos o… simplemente alguien que quiere expresar una idea. Inquietante.
Fuente: techreview