Si han visto episodios de los diferentes programas de cocina por televisión, se habrán dado cuenta de que la vajilla y la presentación juegan un papel tan importante como el propio sabor de la comida. Por ejemplo, parece que colocar la comida en platos de color azul motiva a comer menos. De la misma manera, cualquier comida que sea de color verde pálido es totalmente inapetente, no importa que tan sana sea.
Philips Design y el Laboratorio Arzak han llevado más allá estas asociaciones sensoriales de la comida, utilizando la tecnología de la integración y creando un plato multi-sensorial que estimula los sentidos, mediante el uso de la luz, la vibración del sonido y la corriente eléctrica.
Esta vajilla innovadora reacciona a la temperatura de la comida y también al movimiento de los cubiertos. Nuestra percepción del sabor de la comida y de cómo la disfrutamos cambia mediante la estimulación sutil de nuestros sentidos, creando así una experiencia gastronómica más sofisticada.
Una subestructura cristalina cambia de apariencia con imágenes móviles – que evocan el fuego, el hielo, el agua, etc – y han sido diseñadas para contrastar o complementar los alimentos servidos en estos platos.
La experiencia gastronómica pasa a ser juguetona y sorpresiva, debido al monitoreo sumamente sensible de la temperatura de los alimentos y a una serie de sensores motores que reaccionan a los cubiertos y a la comida. Los platos reaccionan a los utensilios que estimulan sutilmente los labios y la lengua.
Habrá que probar dicha vajilla innovadora para ver si es tan cierto todo lo que se pregona.