La empresa DARPA (Defense Advanced Research Projects Agency), según versión oficial, busca optimizar la mente de las tropas de Estados Unidos, atraves de cascos especiales, para prevenir futuras lesiones cerebrales y estrés traumático, así como mejorar la capacidad cognitiva, regular el estado de alerta y disminuir el dolor de los soldados.
Actualmente existen técnicas de estimulación magnética transcraneal que permiten esto (el llamado “casco de dios”), pero estas técnicas son invasivas, requieren implantes o al menos la instalación de electrodos.
Por esto DARPA está asociado al neurocientífico William Tyler de la Universidad de Arizona State, quien ha desarrollado un método no invasivo de estimulación cerebral a través de ultrasonido.
El “pulso ultrasónico transcraneal” de Tyler es capaz de simular decenas de circuitos cerebrales desde afuera hacia adentro. Este metagadget ha demostrado ser capaz de actuar en regiones profundas del cerebro y en regiones específicas de hasta 2 o 3 milímetros.
Además, los prototipos son lo suficientemente pequeños para insertarse en un casco sin causar molestias. En resumen, pronto habrán soldados programados para sentirse bien mientras matan, con sus sentidos aumentados, a un pelotón de enemigos.
Con los fondos de DARPA, Tyler planea crear un aparato de estimulación cerebral completo, un gadget en el que converjan todas las posibilidades de estimulación cerebral usando un aparato micro controlador, con el que se pueda transmitir ultrasonidos para atacar y modular regiones cerebrales específicas.
Obviamente esta tecnología además de poder ser utilizada en sus propios soldados, que serían prácticamente cyborgs orgánicos, el ejército de Estados Unidos lo podría usar de forma secreta en sus enemigos para generar efectos negativos, como cansancio y estrés, etc.
Enlace: Pijamasurf (visto en Wired)