El Super Bowl, el mayor de todos los eventos deportivos, romperá todos los récords de la innovación digital y social. Eso es lo que afirma Pete Blackshaw, que lleva 10 años estudiando los anuncios de la Super Bowl, en Ad Age, ya que, según él, la mezcla de innovación digital y social que se produce en la publicidad es cada vez mejor y más llamativa.
Desde luego, tampoco es algo tan sorprendente si se tiene en cuenta que el dinero está en los medios online y los responsables de marketing son muy conscientes de ello, por lo que tratan de optimizar todos los aspectos de su marketing mix en este sentido.
Aunque esta integración se hace evidente en todas partes, hay tres eventos en los que es mucho más notable: la Super Bowl, los Juegos Olímpicos de invierno y la Copa del Mundo. En sólo ocho meses, estos eventos hicieron posible disfrutar de la mayor concentración de inversión mediática en la historia de la publicidad.
Empezaron a nacer modelos muy fuertes de publicidad en las distintas plataformas y las marcas más astutas decidieron no dejar nada al azar, algo que se pudo observar en los anunciantes de la Super Bowl de 2010, en la que los anunciantes habían asentado las bases digitales al mismo tiempo que atendían a la participación de los fans y las recompensas.
Para Blackshaw, hemos entrado en el modelo de mix de medios 2.0, un modelo que se centra en el marco de la conjunción del paid, owned y earned media (medios pagados, propios y ganados), conocido como POEM. El futuro del marketing tendrá que unificar los esfuerzos que se realicen en estas tres variables, pero para ello es necesario encontrar el modo de hacer que esta sinergia funcione.